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Y claro que por ser un blog de fotografía, no vamos a hablar del ruido de una construcción o del frenético pitar de cientos de carros en un trancón. Ruido fotográfico es el tema que nos ocupa hoy. Y es que no hay nada más inquietante que creas tener tu foto del año, esa foto mágica que podrás poner en tu carpeta de exposición y cuando la pasas a tu revelador te das cuenta que está llena de ruido, o que no puedes hacer los ajustes que quieres porque se te carga de molesto ruido.
Empecemos por entender qué es el ruido. El ruido es un grano para muchos muy molesto que ves en tus fotos cuando el sensor de tu cámara, por uno u otro motivo, interpreta de forma incorrecta la luz que está capturando. Para no entrar en mucho toque toque técnico, te cuento que el ruido puede generarse por tres cosas principalmente: 1. Por exponer mal tu foto 2. Por amplificar en exceso la señal de lectura del sensor 3. Por dejar que tu sensor se caliente.
Si te fijas, los tres puntos conducen a relacionar el ruido con un mal funcionamiento del sensor. Pero no te angusties, no significa que tu cámara esté dañada. Ten presente que la tecnología que nuestros equipos utilizan, pese a que sea avanzada hoy por hoy, todavía está lejos de ser perfecta. Entonces debemos utilizar correctamente lo que la ciencia nos va dando e intentar sacarle su jugo al máximo. Importante decirte que existen dos tipos de ruido, el de luminancia y el ruido cromático. Su principal diferencia es que uno parece grano blanco y negro y el otro, grano colorido. Obsérvalo tú mismo. Te dejo ejemplos de fotografía con y sin ruido.
Como puedes ver, cualquiera de los dos tipos de ruido va a traducirse en pérdida de definición y calidad general de tu fotografía. Claro, habrá quien diga que el ruido puede funcionar como recurso artístico y tiene razón. Pero sinceramente creo que es mejor agregarle ese efecto en postproducción. Así tendrás una pieza de calidad, con un look hecho a medida ¿me sigues? Sea cual sea el aspecto final que quieras darle a una foto, prefiere siempre tenerla bien expuesta y sin ruido al momento de la captura.
Ya puedes ir intuyendo cuál es el truco para evitar el molesto ruido. Sin embargo, para que el tema no se nos quede en el aire, quiero listar unas cuantas sugerencias puntuales con las cuales vas a poder contar con fotos al 100%:
Expón correctamente: La exposición correcta es un proceso técnico a través del cual logras aprovechar todo el rango dinámico que ofrece el sensor de tu cámara. El tema resulta picante para muchos ya que es algo etéreo y la metodología puede variar según los resultados artísticos que quieras obtener. Muchos te dirán que "derechees" el histograma y así obtendrás una correcta exposición. Pues digamos que sí y no. Es un consejo que hay que tomar con pinzas porque como te digo, según lo que quieras con tu foto pueda que lo mejor no sea derechar totalmente el histograma. Sin embargo, derechear el histograma desde captura sí que es un paso adelante hacia obtener mejores resultados. Esto es así porque el sensor registra mejor los datos de captura en la mitad derecha del histograma. Es por eso que hoy día en fotografía digital, resulta más fácil recuperar una zona de altas luces sin mayor implicación para la calidad de tu foto, que recuperar una zona de sombras. Aunque el cómo exponer correctamente se escapa de este post por ser tema complejo y largo, te recomiendo que estés atento de los próximas entradas de nuestro blog. Pronto estaré enseñándote cómo exponer. Exponer de forma adecuada garantiza que aproveches toda la capacidad de tu sensor. Así obtendrás una foto de alta calidad en cámara y por supuesto será un excelente insumo a la hora de editar.
Iso bajo, por favor: El iso de tu cámara es esa opción que te permite capturar más luz con tu sensor de forma electrónica. Es una maravilla porque cuando la apertura del diafragma y la velocidad de obturación están en el límite de tu "decisión de captura", el iso te puede dar una mano importante dándote más luz sin tener que cambiar los valores anteriores. Sin embargo, el iso tiene una pega. Y es que básicamente cuando subes el iso, estás forzando el sensor a través de la amplificación de su señal de captura. Al subir el iso tu sensor no se dañará ni mucho menos, pero sí perderá capacidad de fidelidad de registro. Y cuando eso pasa... aparece mucho ruido. Por eso siempre que puedas y la situación lo permita, cuadra tu diafragma y obturación para que no tengas que modificar el iso nativo de tu cámara. Iso nativo es aquél valor iso determinado por el fabricante como unidad básica o unidad numérica de partida. Por ejemplo, mi Canon, como la mayoría de las cámaras tiene un iso nativo de 100, pero hay en el mercado algunas referencias cuyo iso nativo varía. Algunas Olympus cuentan con un iso nativo igual a 200. Te estarás preguntando, bueno y si no debo subirlo entonces ¿para qué las cámaras tienen esa opción? Entiendo tu preocupación. Las cámaras actuales cuentan con sensores avanzados y una excelente respuesta a valores iso elevados. Y si está ahí es para usarlo. A mí me es útil jugar con valores Iso altos en momentos en los que debo exponer fotografías muy muy rápido. Por ejemplo, en un evento corporativo, una boda o la foto de un ave que de repente me gustó y por no estar preparado debo capturar de forma improvisada. En estos casos no tendrás ningún problema y será más que válido usar un iso alto para ayudarte. Pero si lo que quieres es una fotografía de retrato editorial o una fotografía de producto para un cliente exigente, cuidado. Es mejor que no te arriesgues.
Cuidado en larga exposición: si lo tuyo son las fotos de larga exposición, deberás ser muy cuidadoso. Cuando el sensor se calienta, es común encontrar mucho ruido. El calor afecta los fotodiodos del sensor y entonces tu cielo en larga exposición tal vez resulte con más estrellas de las que en realidad tenía jeje. Por eso es importante que seas muy minucioso a la hora de obtener una exposición lo más correcta posible desde el principio. De esa forma dispararás menos y por tanto calentarás en menor medida el sensor. También es importante que tengas revisados locación, encuadre, etc... todo planeado y bien pensado antes de ponerte a disparar como loco. La premisa en larga exposición es hacer la menor cantidad posible de disparos. Tus fotos lo agradecerán. Por supuesto que hay otros factores que influyen. Por ejemplo, si estás en una zona geográfica cálida, deberás ser mucho más estricto con este tema que si estás en una zona fría. Sebastián, he disparado mucho ¿y ahora qué? No te preocupes, así como tu sensor se ha calentado por mucho uso, también se enfriará si dejas de molestarlo un rato. La paciencia, qué digo, ¡la mucha paciencia! es crucial en la fotografía de larga exposición. Así que no debe importarte demasiado descansar un rato para volver a empezar.
Luz extra: Como ya has podido inferir, es más fácil que tu foto se arruine con ruido si la captura es oscura. Por eso para fotografía en bajas condiciones de luz donde no puedas valerte de la obturación para compensar, por ejemplo en la fiesta nocturna de un matrimonio donde todo el mundo se mueve como loco, más te valdrá usar luces artificiales de apoyo. Así tendrás mejores exposiciones sin tener que forzar tu sensor o arriesgarte a que todo el mundo salga corrido por intentar capturar más luz con una velocidad de obturación baja.
¿Y qué pasa con los motores de reducción de ruido que traen los reveladores? Puede que estés diciendo, bueno pues si me paso de ruido igual Lightroom o Capture One me lo resuelven. Pues sí y no. Ten cuidado con eso porque los gestores de ruido son algo destructivos o en su defecto, poco eficientes. Lightroom , por ejemplo, te permite reducir mucho ruido tanto de luminancia como cromático. Pero te darás cuenta que hay que pagar un alto precio a la hora de hacerlo, porque al final tendrás una imagen algo lavada y con un efecto blur o desenfoque bastante desagradable. Capture One en su defecto, no es tan capaz a la hora de reducir ruido, pero las reducciones que hace son más orgánicas y menos destructivas. Así que yo me quedo con una buena exposición, iso bajo, un sensor frío, luces de apoyo y en último caso un motor de reducción de ruido orgánico como el de Capture One.
Con cariño,
Sebastián Zerrate
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